En la navidad de 1986, Valéria era una niña de 15 años estaba en un viaje en barco a Argentina con su padre y hermana. El barco era precioso, el ambiente era estrictamente familiar, todos pasaban juntos la Navidad.
Un buen día, Valéria vio tropezar a un tipo, no pudo resistir y se echo a la risa. Él debió de pensar que ella se estaba riendo con él, y no de él, y le correspondió con una sonrisa.
Cuando el barco atracó en Buenos Aires, se acercó a hablar con Valéria. Conoció a un chico de 25 años que estaba terminando Educación Física, que le gustaba hacer surf, estaba viajando con sus padres y que vivía en Sao Paulo. Y entre conversación y conversación, ya Valéria ya estaba enamorada.
El viaje terminó, se dieron los teléfonos y direcciones, quedaron de verse en Sao Paulo. A los 2 días después el le llamó. Valéria iba a Corumbá para que pase el resto de las vacaciones con sus abuelos. Pero antes él le iría a ver. Se arreglo y se sentó a esperarlo. Las siete, las ocho, las nueve y nada. A las diez, su padre le manifestó "Hija, es mejor que te vayas a dormir, porque él no va a venir". Y ella le digo "¡Sí va a venir, papá!". A las once, Valéria con los ojos llenos de de lágrimas, se fue a su cuarto, y escucha a su hermana decir desde el salón "Pobrecita".
La casa de la abuela en las vacaciones en Corumbá, una pequeña cuidad en Mato Grosso do Sul, en la frontera con Bolivia, capital del pantanal.
Valéria había olvidado lo ocurrido, cuando un día él le llamo; le dio una disculpa ridícula sobre aquel día. Ella le llamo y empezaron a salir. Él era entretenido, le trataba bien y le llevaba regalos. Todos los fines de semana iba a la casa de Valéria, salían al cine... En esa época ella vivía con su padre y no le gustaba nada esa historia; Valéria era muy niña para que saliera con un tipo de 20 años. Y eso que el padre no sabía que en realidad tenía 25 -Era mayor con 10 años a ella.
La cosa empezó a ir más en serio, le iba a ver casi todos los días, y cuando el padre refunfuñaba, ella corría a la casa de su madre. Apareció un asunto nuevo: "El sexo".
Luego de seis meses de salir, él le pide tener relaciones y si no él le dejaba, ella no quería hasta que le convenció, ella pensaba "¿Qué se yo de sexo?". Su madre le llevo un libro -de dónde viene los bebés-.
Como los padres de él estaban de viaje, se quedaron solos en la casa. Apagó la luz y tuvieron relaciones, después él le dijo "Es que no puedo acabar dentro de ti, o si no te dejo embarazada". Y era verdad, ella se olvido de ese detalle pero no era lo que ella esperaba y ella dijo "¡qué raro,qué asco,que horrible!". El otro día en el colegio llevaron el Playboy y se pusieron a hojearlo. en medio de un texto salía una expresión nueva: el sexo oral. -No entendían nada del sexo.
Valéria se pregunto "¿Dónde estaba el preservativo en todo esta historia?" y se respondió "No estaba". ¿Ya existía el SIDA? Sí pero esas era para "Maricones" o para "Las prostitutas" así que ella no necesitaba usarlo.
Continuaron saliendo y poco a poco empezó a asfixiare. Le comenzó a pegarle. Y al final ya le golpeaba por cualquier cosa. En la casa de Valéria nadie sabía; todos le consideraban como un "Santo". Ella vivía nerviosa, intentaba hablar con él pero el se portaba mal le pegaba y después lloraba le pedía disculpas. Otras veces le amenazaba con matar a los padres de ella y después quería tener relaciones. Y le decía "Nunca te libraras de mi, incluso me puedes meter preso, cuando salga te perseguiré hasta encontrarte. Con dinero e influencias" Y ella no sabía qué hacer, solo ella quería estar muerta...
Un día salieron juntos, su abuela le descubre pegándola. Fue un escándalo. Hasta que su madre le llamo al conserje, que subió y lo echó. Nadie lo podía creerlo lo consideraba un buen
muchacho. Como padre estaba de viaje, le llamaron al tío, pero no estaba. Al final le llamaron a la tía Cica que se de esas personas que toman las riendas de la situación. Les tranquilizó a todos y llamó a la casa de los padres de él, dijeron "Que eso era normal y que estaban acostumbrados a esos ataques y que estaba bajo control". Después el llamo a la casa de Valéria y decía barbaridades; la familia de él no había tomado ninguna precaución y él todavía andaba suelto por ahí.
Era marzo de 1988 y ya empezarían clases. Su tío ya había llegado y penso que era mejor irse de la ciudad por un tiempo. les llevo a un hotel del campo. Mientras que en Sao Paulo estaban buscando un abogado y descubrieron que la policía no podrían ayudarles en mucho.
Después de una semana regresaron a su casa, y ella ya volvía al colegio pero no era fácil. Sus amigos le preguntaban y ella no sabía que contestarles porque se moría de vergüenza por lo ocurrido y nunca les contestaba con la verdad. ella quería que no le hubiera pasado esto jamás y le duele mucho acordarse. Y dijo que es mas doloroso saber que no es la única. Ella creía que era culpable o que lo merecía. Y le daba ganas de salir gritando... Pero que hay otras personas que optan por el silencio.
Él le seguía persiguiendo más o menos un año, con cartas, llamadas telefónicas llenas de amenazas. Jamás salía de la casa sola.
Descubrieron que él tomaba drogas, y con eso surgió la pregunta del SIDA. Todo tenía sentido, Él al solicitar un trabajo en la policía, lo rechazaron después de hacerle un examen de sangre. Él tenía SIDA, y era mucho en la cabeza de Valéria, y ella no les había contado a sus padres que había tenido
relaciones con aquel chico.
En aquella época el SIDA era muy raro en las
mujeres.